Después de más de siete
años sin sacar un disco propio, Ramón Prada
presenta Veinte canciones de amor y un poema desesperado,
una obra diferente a todo lo que se conoce hasta ahora del compositor
asturiano. La obra que se presenta ahora fue grabada en 1997, al poco de terminar su Noche Celta y en un período especialmente creativo. Aunque se trata de una grabación que, en principio, nunca se hizo para ser publicada, sale ahora a la venta en una edición especial limitada de 500 copias. Veinte canciones de amor y un poema desesperado
son veinte improvisaciones, casi todas ellas al piano, que reflejan
mejor que nunca el pensamiento musical de su autor. Canciones muy
íntimas y personales donde se puede disfrutar de una música
llena de belleza y de evocativas imágenes abstractas. Es difícil ver o escuchar a Ramón Prada interpretando su propia música. Es más común verle trabajar para otros o que otros interpreten sus composiciones. En esta ocasión, abre su universo musical para todos y nos presenta una colección de canciones intimistas y delicadas que demuestran, una vez más, que la música y el sentimiento conforman la base sólida con la que compone sus creaciones. En palabras del autor: “sea como sea, escúchese
sin prejuicios, a media luz, y déjense llevar, sin condiciones,
por la música que surge espontáneamente de la nada”. |